CABUDARE
BUCOS Y MAMEYES
Juan de Dios Ponte Heredia “Ejemplo vivo”
Américo
Cortez
Cronista
de Cabudare
El escritor
Willinger Silva lo llamó “hombre ilustre, ejemplo vivo para generaciones
enteras” y no se equivocó, porque al revisar el trajinar en la vida de Juan de
Dios Ponte podemos observar rasgos propios de los que no esperan el aplauso, ni
la lisonja adulante, de aquellos que aspiran sacar partido o prebendas de una
amistad de su tipo.
Nació este
ilustre personaje en Cabudare el 8 de febrero de 1.805. Sus padres Juan de de
Dios Ponte y Bárbara Heredia, ambos también de Cabudare. Estudió en Cabudare y
luego en Barquisimeto y El Tocuyo, para culminar en Caracas su bachillerato. Se
licenció en Derecho en la Universidad Central de Venezuela, viniendo luego, a
ocupar cargos de relevancia en Barquisimeto. Hombre ejemplar, fue elegido
Diputado al Congreso Nacional en 1.833.
Fue llamado
a gobernar interinamente la Provincia de Barquisimeto en 1.837 hasta 1.841. Su
lema era “decir y hacer” y en la práctica lo demostró. Logró hacer una
revolución en la realización de obras públicas.
Encauzó las
aguas del río Turbio, por medio de tubos, llevándola hasta la meseta de
Barquisimeto, colocando parte de su patrimonio en dinero, pues el Estado no
tenía como hacerlo. Terminado su mandato, la tubería estaba en la parte más
alta de la meseta y al proponérsele que de nuevo fuera Gobernador, para seguir
su obra social dijo “el poder en manos de una persona por mucho tiempo es un
peligro”. En una conciencia ecológica como pocas, compró las tierras del bosque
Macuto y más allá, para lograr recuperar el cauce del río. Para ello mandó
reforestar y sembrar inmensa cantidad de árboles. Se hicieron excavaciones y el
agua volvió a torrentes. Promovió la navegación por los ríos Turbio y Yaracuy.
Igualmente hizo las excavaciones para que la laguna La Mora, tuviera agua todo
el año, cosa que logró. Durante su administración se construyó en la plaza
Bolívar de Cabudare una pila agua, para que los vecinos pudieran servirse de
ella, sin tener que ir a las quebradas cercanas. Su mentalidad futurista, le
señalaba la necesidad del agua para el desarrollo de la población y la
sociedad.
Organizó y
realizó planes de viviendas, vialidad y organizó las fuerzas del orden público
para garantizar la paz y la seguridad a los ciudadanos.
Construyó la
antigua catedral de Barquisimeto (iglesia San Francisco). Por cierto, a él se debe
la creación de la Diócesis de Barquisimeto, pues en 1.847, estando en el
Congreso Nacional, conjuntamente con el Dr. Ramón Perera, presentaron la
solicitud y se decretó el 7 de mayo de ese año. El primer Obispo de ella fue el
Pbro. Francisco Más y Rubí.
El Colegio
Federal que había sido decretado por el Presidente José Antonio Páez, años
antes vio la luz pública gracias a recursos que de su bolsillo colocó Ponte, al
saber la necesidad del mismo para el pueblo barquisimetano. De igual manera
compró casa para la instalación del Asilo de Ancianos e instituyó en la cárcel
la Escuela de Artes y Oficios, para que los presos aprendieran un oficio y al
salir se incorporaran al mercado de trabajo. En Cabudare existió una escuela
municipal con su nombre. En la actualidad y desde 1.959, la segunda calle más
importante de Cabudare lleva su nombre, la que pasa al lado del Concejo
Municipal de Palavecino.
Fue un
gobernante honesto, alto tribuno, Diputado y Senador de la república, pero
sobre todo hombre inspirado en su papel como servidor público. Tal vez, el
primer Gobernador de Lara ecologista, por lo cual debería llevar su nombre
algún espacio del Bosque Macuto. Si, ejemplo vivo para generaciones enteras y
para aquellos que pretendan gobernar nuestros pueblos.
Retirado a
la vida privada y ya anciano muere en Barquisimeto el 18 de abril de 1.894.
@proyectosarao